Cuando Jesús envía por primera vez a sus discípulos a proclamar el Reino de Dios en palabras y obras, los envía de dos en dos (Marcos 6:7). Para formar una nueva generación de discípulos misioneros, la Arquidiócesis de Los Ángeles fomentará tres prácticas misioneras simples de dos en dos: reflexión del Evangelio, oración y actos de caridad y justicia.
Reflexionar juntos sobre la vida y las palabras de Jesús en los Evangelios despierta la fe y nos ayuda a compartir a Jesucristo con los demás. Orar juntos, en voz alta, abre corazones a Jesús. Hacer actos de caridad y justicia - con intencionalidad - demuestra el amor y la misericordia de Jesús. Participar en estas prácticas misioneras formará corazones para la misión de la Iglesia y aumentará confianza en la proclamación del Evangelio.